7.3.13

Ray Charles: What I´d say



Dicen que la primera traición, como el primer amor, es la que más duele.

Los humanos somos seres pasionales, a veces dados al dramatismo barato y a las escenas de vodevil. La primera vez que nos traicionan sentimos que nuestra inocencia se rompe en pedazos, levantamos un puño al cielo y juramos, como Scarlett O´hara, que nunca más volveremos a ser engañados. 

Ilusos…

Las segunda vez que nos fallan nos lo tomamos con más calma, hay menos enfado y más decepción. A partir de la tercera no hay vuelta atrás. Ni rastro de rabia o decepción… Si acaso aburrimiento, porque ¿cómo sentirnos defraudados por quien ya sabíamos que iba a fallar?

Con la música ocurre lo mismo. Ayer, casualmente cayó en mis manos la lista de los discos más vendidos el mes pasado en España. No hubo sorpresas. A medida que leía nombres, el talento caía en picado y mi pereza iba en aumento. Por eso he decidido someterme a un tratamiento de choque. El post de hoy está dedicado a uno de esos artistas que, con una sola de sus notas, son capaces de enamorarnos, de devolver la música al lugar que le corresponde. 

No creo que hagan falta presentaciones. Damas y caballeros, pónganse en pie para recibir a… ¡Mr. Ray Charles!